REIKI, energía de AMOR!

Cuando decidí iniciarme en Reiki tenía mucha curiosidad y empecé a entender que más allá de la vida que llevamos diariamente, había algo mucho más importante por lo que tenía que ocuparme y eso, era YO. Ese interior tuyo que necesita atención y cuidados y que, en definitiva, es lo que hace que el resto funcione bien. Para mi y para muchas otras personas, el Reiki es otra manera de entender la vida, es dar y recibir, es energía vital que se siente, se respira y se emana. Ayuda a sanar emocional, física y espiritualmente. Se deshacen los bloqueos de energía estancados en el cuerpo, devolviendo el equilibrio y ayudando a entender la situación que provocó ese bloqueo. El Reiki es amor hacia nosotros mismos y hacia los demás. Cuando gestionás los pensamientos y emociones y resolvés los conflictos pendientes de la vida, te liberás de esa carga que te no te deja avanzar, que te genera insatisfacción y es ahí, en ese momento, cuando empezás a sentirte verdaderamente libre y responsable de tu propia vida. Eso te convierte en una persona feliz, lo que no quiere decir que no tengas problemas y momentos de tristeza. Una persona satisfecha con su vida, consigo misma, irradia su felicidad a los demás y se crea un mundo nuevo. El Reiki me enseñó a no preocuparme, a no enojarme, a ser agradecida, a respetar y honrar a mis maestros, a ser amable con el resto (uno no sabe por lo que el otro está pasando) y sobretodo a AMAR absolutamente todo lo que hago y a quienes me rodean. Es por esto y por mucho más que no podría explicar lo que es para mi pero tengo la convicción que este camino lo elegiría una y mil veces más. 

NAMASTÉ.



 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mundos...

Me gané...

CREO